Montar a caballo es saludable

La pasión por el caballo va mucho más allá de ser una afición o deporte; el contacto con el caballo proporciona una serie de beneficios para nuestro estado físico y mental que no todo el mundo conoce. A continuación te indicamos cuales son los doce puntos más importantes que hacen que el montar a caballo no sólo sea una afición, sino un deporte saludable.

Dar paseos subidos a esos animales por el campo tiene su encanto, pero montar a caballo no sólo se trata de eso; de todos es conocido la utilización de caballos para la rehabilitación de personas discapacitadas física o psíquicamente, llamado equinoterapia, es su costado más conocido. Además de ello, también permite que nos pongamos en forma, gracias a sus beneficios para el cuerpo y la mente.
Según publica el diario El País, tras una entrevista a Doña Nuria Gómez, terapeuta de la Asociación Equinoterapia como Terapia, existen 12 beneficios físicos y psicológicos que aporta esta disciplina.
La gran diferencia frente a otros deportes es la interacción directa con el animal; eso lo convierte en una actividad muy atractiva. Además, la equitación es muy positiva para el cuerpo de quienes la practican.


Veamos cuales son estos doce beneficios:

Beneficios físicos

1. La mejora el equilibrio vertical y horizontal.
2. El tronco se mantiene erguido, lo que favorece el control de la postura y ayuda a corregirla.
3. Regula el tono muscular y, además, el hecho de que el caballo tenga una temperatura mayor a la del ser humano favorece la circulación sanguínea.
4. Disminuye la espasticidad (músculos contraídos).
5. Al tener que estar alerta ante posibles cambios de ritmo por parte del caballo se favorece la coordinación motriz fina y gruesa, los reflejos y la planificación motora.
7. Mejora la percepción del esquema corporal y favorece la adquisición de lateralidad.

Beneficios psicológicos

8. El estar en contacto con el caballo favorece la confianza, el autocontrol de las emociones y también mejora la autoestima.
9. Mejora la concentración, la capacidad de atención y, por lo tanto, repercute de forma positiva en la memoria.
10. Que el animal esté bajo nuestro control ayuda a una mejora en la capacidad de atención e inculca sentimientos como el respeto y la responsabilidad.
11. Proporciona nuevos conocimientos.
12. Favorece la ubicación en el espacio y en el tiempo.

Fuente: pasofinotv.com

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